El 1 de diciembre les visitó a los niños húngaros de
Madrid Mikulás con Krampusz (su pícaro compañero) y les trajeron
regalos. La Asociación MADÁCH este año también organizó la fiesta de San
Nicolás, la que esta vez tuvo lugar en la Residencia del Embajador,
donde nos reuinimos más de cien personas para esperar a Papa Noel.
Antes de que llegara Mikulás, el Embajador de Hungría con su mujer
habían encendido la primera vela en la corona de adviento por el
comienzo de la época navideña, y después los mayores presentaron un
cuento sobre Papá Noél que todos los niños escucharon con boca abierta.
Luego cantando canciones húngaras le ayudamos a Mikulás a encontrar la residencia.
Mientras Mikulás descansó un poco después de su viaje largo, algunos
niños le recitaron poemas, otros le dieron sus cartas. Luego los niños
buenos recibieron sus regalos (así Krampusz se quedó decepcionado ya que
no pudo darle „virgács” (varilla) a nadie)
Mikulás nos depidió, pero nosotros nos quedamos un buen rato más charlando, comiendo y haciendo manualidades con los niños.